Si pensamos en lo que debería ser una navaja de categoría elegante, la 112 Ranger Pro nos podría venir a la mente. Sus líneas han sido cuidadas al detalle desde la fábrica americana de Buck. Han incorporado un tipo de acero pulverizado que supera los 60HRC, por lo que no le fallará en sus escapadas y monterías.
El prestigioso fabricante americano ha fabricado la hoja de esta 112 Ranger Pro en un tipo de material martensítico que combina tenacidad, resistencia al desgaste e inmunidad frente a la corrosión. Tiene altos índices en carbono y cromo, y añade a la aleación un buen porcentaje de vanadio y molibdeno, que proporciona a la navaja una mayor dureza.
El acero diseñado por Crucible Industries en Norteamérica, tiene una estabilidad mucho mayor que otros aceros convencionales, gracias al proceso CPM, que pulveriza el metal líquido en polvo y lo presiona en lingotes. Buck utiliza esta aleación en sus piezas más destacadas, ya que permitirá cortes de alto nivel sin fatiga.
Es un acero de alta categoría, con una composición específica de 1,45% de carbono, 14% de cromo, 4% de vanadio y 2% de molibdeno, proporcionándole una dureza de 58-61 HRC.
Esta navaja Buck 112 Ranger ha sido diseñada para un uso continuo y prolongado bajo todo tipo de presiones positivas y negativas, por lo que necesita un bloqueo de hoja fuerte y de calidad. Los desarrolladores americanos han integrado este tipo de tecnología clásica situada en la parte posterior de la navaja.
El bloqueo Back Lock consiste en un gancho incrustado en la cacha que cuando se presiona desbloquea la hoja para que el usuario abra la cuchilla y pueda comenzar a trabajar. Este gancho presiona la navaja cuando está abierta y no permite que se cierre en ningún momento. La acción de desbloqueo es igual de simple, ya que sólo hay que presionar la muesca trasera.
La cuchilla diseñada por Buck para la 112 Ranger Pro es de tipo Bowie, que se caracteriza por una hoja que comienza desde la misma cacha y que a mitad de camino cambia su trayectoria recortándose hasta la punta, lo que genera un extremo mucho más fuerte e ideal para la perforación y punción de objetos.
Así mismo, tiene un gran perfil recto que aumenta la superficie de trabajo, por lo que permite cortes profundos y limpios sobre texturas y pieles. Esta navaja podría, por tanto, utilizarse como complemento en una montería o en actividades relacionadas para la caza y despiece de animales.
El material del mango de la navaja Buck 112 Ranger Pro también está diseñado para soportar la fatiga producida por un uso continuo a diario, ya que está formado por capas de fibra de vidrio y que presenta una increíble resistencia química por contacto con productos de este tipo (aceites, combustibles). Así mismo, cuenta con inmunidad frente a la abrasión y a condiciones extremas.
Otro factor fundamental a la hora de escoger esta magnífica navaja es la gran variedad de utilidades que tendrá la pieza, ya que la estupenda dureza y resistencia de este material posibilitará su uso en cualquier entorno. El G-10 es, sin duda alguna, uno de los materiales más recomendables a la hora de escoger navajas y cuchillos.
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